Películas eróticas gay para ver en pareja

El cine siempre ha sido una muestra de la realidad cotidiana, y por eso ha llegado a ser tan importante en la vida de tantos y tantos espectadores. Hay géneros de evasión, por supuesto, como la ciencia ficción o la fantasía, pero la mayoría de películas son realistas, ya sean dramas o comedias. El cine es una herramienta perfecta para analizar como una sociedad va evolucionando, a lo largo de su historia. Claro que la mirada debe ser muy amplia, y no quedarnos solo con el cine más comercial, el de Hollywood, ya que en este caso nos perderíamos muchas grandes películas. El cine europeo se ha mostrado siempre más sujeto a la realidad cotidiana, aunque con algunos toques de surrealismo en ciertos casos. Sin embargo, lo que todos tienen en común es el tratar temas que son relevantes para la sociedad.

El cine gay existía desde hace décadas, pero estuvo durante mucho tiempo maltratado y censurado, por ser obsceno e ir contra la moral, según muchos países. Las relaciones homosexuales no se veían en pantalla, y como mucho se intuían. Cuando aparecían de forma clara, de hecho, la cosa solía salir mal, como si hubiera que “castigar” este tipo de amor. La situación comenzó a cambiar en los años 80 y ya en los 90 tuvimos películas realmente exitosas que contaban historias sobre gays y lesbianas. El cine erótico también se ha acercado a este fenómeno desde su propio género, aunque siempre con la sombra del machismo imperante. Y es que era habitual ver en películas eróticas como dos chicas se daban placer, pero nada de juntar a dos hombres. El público mayoritario del cine erótico era precisamente masculino, y por eso se pensaba que una escena con dos chicos podía ser mal valorada por dichos espectadores. Sin embargo, encontramos muchos ejemplos de cine erótico gay que por fortuna ha llegado a nuestros días, y que supone un impulso perfecto para encender la libido con nuestra pareja.

El cine gay a lo largo de la historia

El cine de Hollywood solo ha acogido las relaciones gay en la pantalla desde hace unos pocos años. Tal  vez el éxito de Brokeback Mountain haya sido el primero en dotar de verdadera profundidad y relevancia una relación entre dos hombres, en una película además de un género tan hetero como el western. En sus orígenes, el cine clásico presentaba a los llamados sissy, homosexuales con mucha pluma que servían normalmente como alivio cómico. La situación en la meca del cine continuó hasta que en los 90, los personajes homosexuales comenzaron a tener mayor presencia, en películas como Philadelphia o Una Jaula de Grillos. El cine europeo sí que había tratado el tema de la homosexualidad de manera mucho más directa, sobre todo en Italia, Francia y España. En Europa sí que podemos encontrar algunos ejemplos de películas eróticas con temática gay, aunque como comentábamos arriba, la mayoría ofrecían espectáculos lésbicos como excusa en la trama.

¿Por qué ver películas eróticas gay junto a tu pareja?

Tal vez la rutina, el cansancio o el estrés haya provocado que tú y tu pareja no estéis tan activos sexualmente en los últimos meses. Suele ocurrir, especialmente cuando la relación ya tiene un tiempo. Sin embargo, es algo que hay que saber encaminar, porque la vida sexual es una parte imprescindible dentro de una relación de pareja. Utilizar una película erótica gay puede servir para encender vuestra pasión de nuevo, e incluso para daros ideas… Lo bonito de una relación en la que los dos están seguros de querer disfrutar es que se pueden explorar muchas formas de pasión. El erotismo sirve precisamente para eso, para enaltecer la imaginación y provocar fantasías, en contra del porno, que directamente es más explícito. Por eso, el cine erótico puede ser la llama que prenda nuestro deseo y nos haga disfrutar mucho más con nuestra pareja, una buena opción para recuperar esa pasión perdida.

Películas eróticas gay que debes ver

La mayoría de películas comerciales con temática erótica gay han aparecido en este nuevo siglo, cuando por suerte la situación sobre la homosexualidad se ha normalizado mucho más, y ya no se puede censurar un filme por sacar a dos chicos besándose. Encontramos un ejemplo perfecto en Gotas de Agua sobre Piedras Calientes, una película alemana del año 2000 que nos lleva a la Alemania dividida de los 70, donde un cincuentón consigue seducir a un joven de tan solo 19 años. La relación parece idílica, pero surgirán problemas entre ellos que podrían hacerla acabar muy mal. Luster nos muestra una mirada profunda y hedonista de las relaciones gay, con un poeta protagonista que, después de llevar a cabo una orgia, cree enamorarse de uno de los participantes. Eating Out, lanzada en 2004, no tiene tantas escenas eróticas pero es una comedia romántica que rompe los roles del género, cuando una chica hace que su pretendiente hetero se enrolle con otros chicos, porque eso la pone cachonda.

Brockeback Mountain tampoco es una película que cuenta con escenas realmente eróticas, al menos no demasiadas, pero es imposible dejarla fuera de esta lista por su importancia en el cine comercial gay. En Anphetaime tenemos una relación intensa entre un chico hetero y otro gay, que intentarán solventar los problemas que supone la diferencia de orientación sexual para vivir una aventura llena de sexo y excesos. Los mismos que encontramos en Theo y Hugo, película francesa del 2015 que relata como pocas la vida nocturna de una pareja homosexual que se conoce en un club una noche, e inicia una relación donde todo puede pasar. Para terminar, La Noche, una interesante película argentina que nos muestra el lado gay de Buenos Aires a través de s u protagonista, un chico que decide salir a disfrutar de un poco de sexo con desconocidos.

¿En qué plataformas encontrarás algunas de ellas?

Por fortuna, en los últimos años no solo hemos tenido un mayor aperturismo en lo que al cine gay se refiere, sino también en el catálogo erótico de muchas plataformas de streaming. En HBO encontraremos algunas de las películas más comerciales de esta temática. Amazon Prime Video cuenta también con algunos títulos muy interesantes, e incluso independientes, a los que debemos echar un vistazo. Netflix también tiene varias series y películas de temática gay, aunque no suelen ser demasiado explícitas. Y por supuesto, aquí en España tenemos el orgullo de contar con Filmin, la plataforma de cine independiente donde sí que podremos encontrar muchas de estas películas europeas eróticas, sin censura y a un precio de suscripción más que razonable.